Por: - Diciembre 21st, 2019 - Sin Comentarios »

Una Navidad diferente, una mejor Navidad

Desde que yo, en mi rol de hija, vivía la Navidad, nunca fue el festival del regalo. Por lo mismo, y también mi marido, no crecimos bajo el concepto de una Navidad donde era más importante la calidad que la cantidad. Creo que es un tanto generacional (para los nacidos en los 80) esa concepción de la Navidad, nuestros padres nos criaron en un contexto social igual o más complejo que el actual y las fiestas de fin de año siempre tuvieron un tono más bien austero. 

Con mi ahora otro rol, el de madre, hemos vivido navidades bastante parecidas a las de mi experiencia de hija. Quizás por lo mismo, entre todo lo que sucede en nuestro país, no me afecta pensar que esta Navidad pueda ser difícil en términos financieros.

Al contrario, creo que será para mi familia y muchas otras familias chilenas una fecha que ojalá permita que los adultos que se pelean por redes sociales día a día, los que abandonaron el grupo de Whatsapp familiar, los que ya no se pueden ver, (aunque probablemente ya lo hacían desde antes del estallido social pero ahora hay motivos) que todos ellos podamos sentarnos en la mesa y compartir una rica comida, celebrar a los niños, abrir los regalos incluso antes de la cena, regalar con sentido, algo más pequeño quizás pero lo que ellos quieran. 


Y no, no voy a regalarles a mis hijos un regalo espiritual, no voy a pedirles tampoco que me pidan solo regalos que no sean materiales, ¡SON NIÑOS! Y si quieren un juguete haré lo posible por comprarlo. Sé que no habrá lista eterna porque nunca la habido y eso no ha cambiado.

Creo que sí, un gran cambio en mí y en muchos padres será el cómo enfrentaremos económicamente la Navidad este año. En mi caso, ya tengo muy claro que no me endeudaré, no gastaré más de un monto x y por sobre todo, me encargaré de que ese día, tengan el mejor ambiente familiar posible y que ojalá muchos más, queramos lo mismo en este cada día más polarizado ambiente nacional.